«La historia de un nuevo centro escolar que lleva más de seis años de retraso y está suponiendo un gasto extremadamente desproporcionado», explican desde el PP de Alhama
«Hace unos días salía el concejal de Urbanismo, Antonio Caja, señalando que después del segundo parón en el desarrollo de las obras de El Pabellón de El Praíco y resueltos los problemas, una nueva empresa acometería las obras para concluirlo.
Sin embargo, ahora nos enteramos de que, nuevamente, la única empresa que se presentó a la licitación de las obras no ha presentado la documentación requerida. Por lo tanto, no hay empresa que siga con dichas obras y siguen paralizadas a pesar de que de 1,3 millones de euros que había presupuestados para su desarrollo, ya vamos por casi los 2 millones de euros.
El capricho del PSOE, dirigido por Mariola Guevara, nos va a dejar las arcas municipales tiritando. A los problemas por la geología inadecuada del terreno y la existencia de las minas de ocre, ya advertidas por numerosos vecinos y que han venido siendo un problema para todas las construcciones en ese lugar, incluida la antigua piscina de verano que finalmente tuvo que ser abandonada por continuos deterioros que esto ocasionaba, y a que para que el instituto pudiese construirse en la caprichosa ubicación ha sido necesaria la urbanización total de la zona, incluido el encauzamiento de una rambla, se une la espantosa gestión de los proyectos y contratos de ejecución por parte de la corporación socialista.
Antecedentes
El nuevo instituto Valle de Leiva iba a ser construido en el terreno municipal donde en la actualidad se ha construido el nuevo Recinto Ferial. Los terrenos estaban cedidos y el proyecto redactado, precisamente, por un arquitecto alhameño. Ya se habían hecho los sondeos en el terreno y las obras salían ya a licitación, por lo que se preveía que el nuevo instituto podría estar concluido en el primer trimestre de 2017. Se eligió ese terreno porque ya existía una urbanización y porque se trataba de un lugar realmente adecuado que, además, permitía actividades al aire libre a sus estudiantes y proporcionaba espacio suficiente para posibles ampliaciones en el caso de que fuese necesario. Además, Nueva Espuña es un lugar de expansión del municipio.
Pero llegó Diego Conesa y Mariola Guevara
Pero llegó a la alcaldía Diego Conesa en el año 2015 con la actual alcaldesa, Mariola Guevara, como concejala de Educación. Conesa, junto a su concejala, dió la orden a los técnicos de que paralizaran todo lo que tenía que ver con el Valle de Leiva porque estaban decididos a que se construyera en El Praíco. A reglón seguido maquillaron su decisión con una supuesta encuesta popular en la que votó todo el que quiso, grande o pequeño y que inducía a error.
Esa decisión, en contra del interés público, ha supuesto hasta ahora, sin contar el pabellón y solamente a las arcas municipales hasta ahora la friolera de 1.128.766,84€. Ese es el coste de las actuaciones más importantes, pero a eso hay que sumarle otras de otras más pequeñas que han sido necesarias para la urbanización de la zona (48.000 euros, más otros tantos). A estos costes municipales, hay que sumar el incremento en el coste de construcción y el retraso del edificio del instituto Valle de Leiva, que aunque ha corrido a cargo de la Comunidad Autónoma, no dejamos de pagarlo los mismos y que se ha encarecido y dificultado por este terreno inadecuado.
A principios de la legislatura pasada, Diego Conesa, (quien fue alcalde hasta que le ofrecieron la Delegación el Gobierno en Murcia), junto a su mano derecha, la actual alcaldesa Mariola Guevara y el no menos fiel a sus intereses, el concejal de Urbanismo, Antonio Caja, publicitaron a bombo y platillo que una empresa privada sería la que construiría el pabellón deportivo para el nuevo instituto. Todos sabemos ahora que aquello era una mentira flagrante como después se ha demostrado. Era el 1 de marzo de 2018 y la obra estaba valorada en 1,3 millones de euros. En junio 2022 se le rescinde el contrato a la empresa que lo estaba ejecutando porque pide 3 meses y 300.000 euros más para acabar la obra. Antonio Caja dice que lo conseguirá más barato y más rápido, sin embargo en enero de 2023 las obras siguen sin terminarse, no hay empresa que se haga cargo, y su coste ya se acerca a los 2 millones de euros.
Es obvio que el PSOE no gobierna para los alhameños que cada vez tienen menos poder adquisitivo gracias a Pedro Sánchez, con quien Mariola Guevara se fotografía y abraza cada vez que tiene ocasión. Eso sí, Mariola Guevara y sus diez concejales se suben el sueldo un 30% y nos suben los impuestos. Esto es lo que hay.»