Hoy, Día Internacional para la eliminación de la Violencia contra la Mujer, murcianas y murcianos volvemos a manifestar enérgicamente nuestro rechazo a la violencia de género.
La persistencia y creciente violencia contra la mujer hace necesaria que, un año más, el 25 de noviembre (25-N) alcemos nuestra voz para reivindicar su erradicación. No hay acto más deleznable que la agresión de un hombre a una mujer por el simple hecho de serlo. Por ello, debe ser enérgico nuestro grito de condena y rechazo contra aquellos hombres que agreden, denigran, maltratan y en algunos casos asesinan a las mujeres.
Tras unas declaraciones en televisión en 1997, el público le puso rostro y conoció la situación de peligrosidad de Ana Orantes.
Pocos días después de esas declaraciones fue quemada viva por su marido. Este asesinato estremeció y movilizó a todo el país, poniendo de manifiesto la mayor manifestación de violencia de entre personas en el mundo, que no encuentra razones, ni motivos que la justifiquen. Y como Ana, miles de mujeres viven y sufren la violencia de género.
El 25-N debe ser un día para rendir homenaje a todas las mujeres que han decidido denunciar, pedir ayuda y poner fin a una vida de maltrato, humillaciones y violencia. Así como, a todas las mujeres que han perdido su vida, como consecuencia de los malos tratos de sus parejas y/o ex parejas y aquellas que por miedo o por la situación que viven, sufren en silencio.
En lo que llevamos de año, 43 mujeres han sido asesinadas a manos de sus parejas, 39 hijos e hijas de estas mujeres se han quedado sin madre y 3 han sido asesinados.
En nuestra Región, el pasado mes de octubre, una mujer de 23 años del municipio de Beniel fue asesinada a golpes por su expareja bajo la presencia de sus dos hijos menores.
Cada víctima no sólo es una pérdida lamentable e irreparable: es una vergüenza que recae sobre la conciencia de la sociedad y de los poderes públicos.
Según los datos publicados por el Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer, “entre un 15o/o y un 76% de las mujeres sufren violencia física o sexual a lo largo de su vida”. Este estudio define la violencia contra las mujeres como una “pandemia mundial”, que ninguna mujer o niña del mundo está completamente a salvo de sufrir violencia y abusos.
El asesinato de mujeres por el hecho de ser mujeres, no es más que la punta del iceberg, pues millones de niñas en todo el mundo son objeto de prácticas inhumanas, como la mutilación o la ablación genital femenina; la trata de personas condena a millones de mujeres y niñas a una esclavitud moderna. Un estudio realizado en Europa reveló, que el 60% de las mujeres víctimas de la trata de personas había sufrido algún tipo de violencia física o sexual, antes de ello lo que confirma es que la violencia basada en el género es un factor que incita a la trata de mujeres.
Por todo esto, manifestamos la necesidad de la implicación de toda la ciudadanía: gobierno, instituciones públicas y privadas, movimiento asociativo (no sólo de mujeres, sino cualquier ámbito y colectivo), Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Administraciones Locales, etc.
Las niñas y los niños que han presenciado o sufrido violencia, basada en el género, tienen más probabilidades de convertirse, en víctimas o maltratadores cuando sean personas adultas. Por ello, reivindicamos la necesidad de la Educación en igualdad, desde los niveles más básicos, para trabajar la prevención de la violencia de género y el desarrollo de conductas que eviten futuras actitudes violentas entre hombres y mujeres.
Desde este manifiesto, también, queremos ensalzar la magnífica labor de profesionales que atienden cada día a miles de mujeres víctimas de la violencia de género (aportando su “granito de arena”, buscando una salida y apoyando a las mujeres para salir de esa encrucijada). En definitiva, todo un trabajo conjunto y coordinado cuyo objetivo y meta es común: PONER FIN A LA VIOLENCIA DE GÉNERO.
Con este manifiesto, la Región de Murcia se suma a todas las voces que, desde cualquier punto del planeta, condenan cualquier tipo de violencia hacia la mujer, exigiendo un compromiso fuerte y claro de toda la sociedad para unir nuestras fuerzas contra esta lacra social.
La violencia de género, es la máxima expresión de la desigualdad entre hombres y mujeres y la peor de las humillaciones; acabar con ella, es nuestro deber y compromiso. Es un reto realista y esperanzador.
Por ello, no sólo debemos señalar en nuestro calendario esta fecha, como el único día del año en el que condenamos la violencia contra la mujer. Todos y todas, tenemos la obligación de no permanecer en silencio, ni mirar hacia otro lado ante tal tremendo acto de injusticia. Todos los días debemos denunciar la VIOLENCIA, para contribuir a la construcción de una sociedad más justa, solidaria e igualitaria.
Os necesitamos: Únete a poner salida a la violencia de género”.
Esta mañana se ha celebrado la puesta del lazo en la fachada del ayuntamiento de Alhama y esta tarde, 16.30 h. Marcha contra la violencia de género. Sailda desde la recepción del Vivero de Empresas para Mujeres, en C/ Luis Pasteur, s/n.
A continuación: Concentración y lectura del manifiesto de repulsa como fin de la marcha en el salón de actos de la Casa de la Cultura.